Quiero mostraros este ilustrativo vídeo donde podéis ver las posibilidades de movimiento que tiene nuestra pelvis. La amplitud de movimiento que se muestra en el vídeo ha sido exagerada con respecto a la movilidad real, pero me gustaría que os fijaseis en los puntos donde se realizan los movimientos.
La naturaleza ha previsto 3 articulaciones a modo de 3 juntas de dilatación en nuestra pelvis, que van a ser los puntos por donde la pelvis va a modificar la posición de sus huesos, y va a ampliarse para permitir el paso del bebé a través suya en el momento del nacimiento. Estos 3 puntos son la articulación del pubis (situada por delante) y las articulaciones sacroilíacas (que a menudo podemos identificar porque forman una especie de hoyuelos en la parte baja de la espalda). En el momento del parto, estas articulaciones se impregnan de de hormonas que las convierten mucho más elásticas y les permiten realizar movimientos más amplios de lo normal sin lesionarse.
Observa cómo, en la parte inferior de la pelvis, donde están insertados los músculos del suelo pélvico, se produce una separación de estos huesos, lo que hace que la musculatura del suelo pélvico tenga que estirarse para permitir dicha movilidad ósea. Por ello, es muy importante prestar atención al suelo pélvico, cómo expliqué en el artículo «3 razones para cuidar tu suelo pélvico en el embarazo»
https://www.youtube.com/watch?v=n43FJxTjBuQ#sthash.BPS9Gxgx.dpuf
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